jueves, 7 de marzo de 2013

MANIFESTACIONES



El domingo 10 de marzo a las 12 de la mañana 

Las Palmas de Gran Canaria (desde el Parque San Telmo hasta la Plaza de la Feria)
 y
 en S/C de Tenerife (desde la Plaza de los Patos hasta la Plaza del Príncipe).

La Cumbre Social ha convocado manifestaciones en todo el estado español “contra el paro y por la regeneración de la democracia” el próximo domingo 10 de marzo para que la ciudadanía pueda expresar, una vez más, su rechazo a las políticas de austeridad que están dando lugar a un crecimiento sin freno del desempleo y en contra de una situación política dominada por  intolerables casos de corrupción.

Esta movilización se debe vincular también a las movilizaciones europeas que la Confederación Europea de Sindicatos ha convocado para los días 13 y 14 de marzo en contra de las mismas políticas de austeridad que están acentuando el paro y la recesión en la mayor parte de los países europeos.

Canarias con casi 400.000 parados, con más de cien mil familias donde ninguno de sus miembros tiene ingresos económicos y con una vida política salpicada de una manera casi crónica por distintos casos de corrupción, es una de las comunidades autónomas del estado donde mayores motivos hay para salir a la calle el próximo domingo, exigiendo que se ponga fin a las políticas que nos están llevando a un deterioro insostenible de la situación económica, política y social hasta alcanzar niveles insostenibles para la mayoría de la ciudadanía y para exigir que se devuelva a la política su condición de herramienta al servicio de las personas, expulsando a los corruptos de la vida pública y acometiendo las reformas constitucionales necesarias para ello.
 

DECLARACIÓN DE LA VII CUMBRE SOCIAL



CONTRA EL PARO Y POR LA REGENERACIÓN DE LA DEMOCRACIA
10/Marzo, MOVILIZACIÓN

 

Las organizaciones que formamos parte de la CUMBRE SOCIAL convocamos a los ciudadanos a manifestarnos CONTRA EL PARO Y POR LA REGENERACIÓN DE LA DEMOCRACIA el próximo 10 de marzo, sumándonos a la iniciativa de movilizaciones europeas convocada por la Confederación Europea de Sindicatos en el conjunto de la Unión Europea. 

¿PARA QUÉ?


  • Para reprobar las actuaciones de una Comisión Europea enrocada en políticas fracasadas, ajena a los problemas de la ciudadanía europea a la que deben su legitimidad e incapaces de comprender a qué intereses deben servir las instituciones europeas y los recursos comunes de los europeos. Tras cinco años de crisis lo único que crece dentro y fuera de Europa es la desigualdad, el desempleo, la miseria, la exclusión social y las dudas sobre unos dirigentes europeos cuya pertinaz insistencia en políticas fracasadas resulta inaceptable.
  • Para hacer saber al Gobierno de España que el tiempo de las mentiras y los discursos huecos ha terminado. Seis millones de personas en paro, dos millones de ellas sin recibir ningún tipo de prestación, 1,8 millones de hogares con todos sus miembros en desempleo, y cerca del 27 por ciento de la población viviendo por debajo del umbral de la pobreza son la insoportable realidad del país. Una realidad que, según todos los datos, se agravará día a día porque continuaremos en recesión económica, las grandes empresas siguen planteado eres con despidos masivos, continúa la sangría de despidos individuales… El Debate del Estado de la Nación nos mostró a un Presidente del Gobierno cada vez más alejado de los problemas de los ciudadanos. De no corregirse de manera urgente y en profundidad ese distanciamiento puede abocarnos a situaciones como la de Italia, donde las recientes elecciones han demostrado el éxito de las opciones populistas y el hartazgo de una parte de la población con el actual funcionamiento de las instituciones democráticas.
  • Para denunciar, con motivo de la conmemoración del día Internacional de la Mujer Trabajadora el próximo 8 de marzo, las consecuencias que la crisis y las políticas neoliberales tienen en materia de género: incremento de la brecha salarial entre hombres y mujeres, recortes de empleo en la función pública con fuerte presencia de mujeres, reducción de servicios sociales y en la atención a la dependencia que favorecían la incorporación de las mujeres a la vida laboral o supresión de organismo que defienden y apoyan los derechos de la mujer.
  • Para rechazar el desmantelamiento de los servicios públicos (sanidad, educación, dependencia, servicios sociales…) y cualquier reforma unilateral del sistema público de pensiones que lo convierta en otro instrumento de las políticas de ajuste, expoliando nuevamente los derechos de los ciudadanos, y abandonando a su suerte a los actuales y futuros pensionistas.
  • Para advertir al Gobierno y a los grupos parlamentarios de las Cortes sobre cualquier intento de engañar a la ciudadanía en la tramitación parlamentaria de la Iniciativa Legislativa Popular por la Dación en Pago y la Paralización de los Desahucios que desvirtúe o pervierta sus principales objetivos.
  • Para rechazar la reforma de la ley de bases de régimen local, porque debilitará las capacidades de actuación de las corporaciones locales, las administraciones más próximas a  las personas, en un nuevo intento de negar financiación para los servicios a los ciudadanos, mientras convertimos en deudas de todos (tres puntos de déficit público) la fraudulenta gestión de los directivos de las entidades financieras.
  • Para condenar todos los intentos de deslegitimación o represión de los derechos constitucionales de expresión, pensamiento, o manifestación. Exhiben un escalofriante desprecio a los principios democráticos, quienes pretenden criminalizar a los jóvenes por manifestarse libremente desde las instituciones que les representan, especialmente si utilizan como argumento la financiación pública de esas instituciones; con esa lógica deberíamos eliminar los grupos de oposición de todas las instituciones democráticas cuyo deber es controlar y discrepar de quienes ejercen las responsabilidades de Gobierno, por recibir para su función –como es necesario- financiación pública. Condenamos asimismo, la decidida voluntad del Ministerio del Interior de convertir el conflicto social en un conflicto de orden público, ordenando intervenciones desproporcionadas para reprimir manifestaciones pacíficas.
  • Para rechazar los casos de abierta complicidad entre cargos públicos y empresas, que corrompen el ejercicio de la actividad política, levantan ante los ojos de la sociedad un peligroso muro de desconfianza hacia las instituciones democráticas, y aceleran el deterioro del entramado institucional que surgió de la transición democrática.
  • Exigimos que se devuelva a la política su condición de herramienta al servicio de las personas, expulsando a las personas corruptas de la vida pública y acometiendo las reformas constitucionales que sean precisas.
Por todo esto, las organizaciones que formamos la Cumbre Social convocamos a las trabajadoras y a los trabajadores y a la ciudadanía en general a las manifestaciones que se celebrarán en las principales ciudades del país el 10 de marzo.