Vivienda, alimentación y transporte: las necesidades básicas disparan el IPC de enero
El IPC de enero sube por primera vez desde el inicio de la pandemia, afectando a las necesidades más básicas
El IPC de enero se ceba especialmente con la vivienda, la alimentación y el transporte. Atravesando la peor crisis sociolaboral de nuestra historia reciente y en pleno invierno, el IPC ha dado el mayor salto en años y ha pasado de registrar una tasa anual de -0,5% en diciembre de 2020 a ponerse en positivo por primera vez desde el estado de alarma e incrementarse en un 0,5%.
Y lo ha hecho tocando al alza todos los productos básicos para los hogares: la electricidad y el gas han subido un 3,2% el conjunto de gastos de la vivienda; en alimentación, legumbres y hortalizas han vuelto a subir, como durante toda la pandemia, pero también bebidas no alcohólicas, como agua y zumos; y el transporte, tanto los precios de los automóviles como de los carburantes.