El estrés es,
probablemente, el riesgo psicosocial laboral más global de todos porque actúa
como respuesta general ante los factores psicosociales del mundo del trabajo.
Es un estado de agotamiento del organismo que dificulta de forma importante sus
respuestas funcionales y adaptativas.
La respuesta del organismo es diferente según se esté en una fase de tensión inicial o crónica. En la inicial, hay una activación general del organismo y las alteraciones que se producen son fácilmente remisibles, si se suprime o mejora la causa. Ya en fase de tensión crónica o estrés prolongado, los síntomas se convierten en permanentes y se desencadena la enfermedad.