La falta de inversión en los servicios públicos locales: la otra pandemia mundial
La Covid a también evidenciado una otra pandemia mundial y mortífera: la falta de inversión en los servicios públicos locales en el mundo, simbolizado por el fenómeno de la "desertización de servicios" que afecta a muchos territorios y comunidades, especialmente rurales. Décadas marcadas por la desfinanciación sistemática de los servicios, por políticas de austeridad, de evasión fiscal, y de privatización, por las "reformas" de los territorios y la elección deliberada de proporcionar unos servicios únicamente bajo forma digital han provocado un daño profundo y agravado las desigualdades en nuestras comunidades.
Estas políticas han ocultado a menudo la transferencia a los bolsillos de unos accionistas de preciosos recursos públicos necesarios para ofrecer un acceso equitativo a servicios públicos de calidad a todxs en todos lugares. Mientras tanto, las infraestructuras y los servicios públicos en los países en desarrollo siguen insuficientes o inaccesibles, y muchos entre ellos pagan más por el servicio a su deuda que lo que pueden invertir en servicios públicos a su populación. Por ejemplo, las medidas de austeridad ordenadas por el Fondo Monetario Internacional la austeridad a 15 países han impedido la contratación de más de 3 millones de enfermerxs, profesorxs y otrxs trabajadorxs de servicios públicos esenciales.